Interesante pregunta. Más que nada porque es algo que mucha gente da por hecho al contratar los servicios de un traductor. Pero hay que tener en cuenta que alguien que hable dos idiomas y pueda traducir textos correctamente no tiene por qué ser un traductor jurado oficial, que es aquel autorizado por un organismo competente.
La traducción jurada constituye un servicio imprescindible cuando se trata de documentos legales, académicos o administrativos que deben tener validez oficial en otro país. En Andraca y Roman Traductores Jurados te explicamos cómo identificar a estos profesionales y los medios de que dispones para verificar su validez legal.
¿Qué es un traductor jurado?
Se trata de un profesional autorizado por una entidad oficial (normalmente el Ministerio de Asuntos Exteriores, o un organismo equivalente) para llevar a cabo traducciones con validez legal. Dichas traducciones deben llevar el sello, la firma y la certificación del traductor, lo cual garantiza que el contenido es fiel al documento original.
Características principales:
- Traduce documentos oficiales (títulos, certificados, contratos, sentencias judiciales, etc.).
- Sus traducciones poseen validez jurídica.
- Está registrado en un listado oficial.
- Firma y sella sus traducciones juradas.
- No puede alterar ni interpretar el contenido: solo traducirlo fielmente.
¿Cuál es el proceso para ser traductor jurado en España?
El proceso varía ligeramente en función de cada país. España es uno de los países donde la adquisición del título está más regulada.
Se exige:
- Formación académica: es recomendable tener un título en Traducción e Interpretación o en Filología, aunque no es obligatorio.
- Examen oficial: el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación (MAEC) convoca regularmente un examen para obtener el título de traductor-intérprete jurado.
- Superación de la prueba: el examen consta de traducción directa (al español), traducción inversa (desde el español) y pruebas de comprensión escrita.
- Nombramiento oficial: quienes superan el examen son nombrados oficialmente a través de una resolución publicada en el BOE (Boletín Oficial del Estado).
- Registro público: el MAEC mantiene un listado oficial de todos los traductores jurados acreditados.
Así, en el caso de que un traductor afirme ser jurado de inglés a español, puedes buscar su nombre en la web del MAEC para comprobar si realmente tiene titulación oficial.
¿Qué documentos requieren traducción jurada?
- Partidas de nacimiento, matrimonio o defunción.
- Certificados de antecedentes penales.
- Diplomas universitarios y títulos académicos.
- Escrituras notariales, contratos y poderes.
- Documentos judiciales y sentencias.
- Patentes y documentos comerciales registrados.
No obstante, recuerda que no todas las traducciones a diferentes idiomas necesitan ser juradas. Únicamente aquellas que tengan que presentarse ante una autoridad pública o que requieran validez legal.
¿Cómo verificar en España si un traductor es jurado?
1. Consulta el listado oficial del país correspondiente
Como indicamos al hablar del registro público, en España, el MAEC publica un listado actualizado de traductores-intérpretes jurados. Puedes buscar online por nombre, idioma o provincia y comprobar si tal o cual profesional está habilitado oficialmente.
2. Pide el número de registro o copia del nombramiento
Es el número de identificación. Si el traductor es oficial puede proporcionarte su número de nombramiento o una copia del documento que lo acredita.
3. Verifica el sello y la firma
Las traducciones juradas deben incluir:
- El sello oficial del traductor (nombre completo, idioma y mención de “Traductor-Intérprete Jurado”).
- La firma manuscrita del profesional.
- Una certificación final que declara que la traducción es fiel y completa.
Cuando encargas una traducción jurada de un certificado de nacimiento, por ejemplo, tiene que aparecer un sello redondo en el que se indique el nombre del traductor—traductor intérprete jurado de inglés nombrado por el Ministerio de Asuntos Exteriores.
¿Cómo se regula esta figura en otros países?
En Hispanoamérica, la figura del traductor jurado existe, pero varía bastante de un país a otro:
Argentina
- El Colegio de Traductores Públicos (ej. CTPCBA) regula la profesión.
- Para ejercer tienen que estar matriculados y contar con título universitario.
Méjico
- La Dirección General de Profesiones y algunos tribunales estatales certifican traductores oficiales.
- En ciertas ocasiones los traductores deben registrarse en juzgados o a través de notarios.
Colombia
- El Ministerio de Relaciones Exteriores otorga la autorización a los Traductores Oficiales mediante un proceso de evaluación.
Estados Unidos
- No existe una figura de “traductor jurado” como tal.
- La ATA (American Translators Association) certifica a traductores, no obstante, sus traducciones no tienen carácter oficial salvo que sean aceptadas por una institución.
Riesgos de contratar a un traductor jurado no autorizado
A veces, con tal de ahorrarse algo de dinero, más de uno prefiere contratar a un traductor sin la debida acreditación oficial. Craso error, al final lo barato puede salir muy caro. Entre los perjuicios más destacables que te pueden ocurrir:
- Rechazo de documentos por parte de autoridades (universidades, embajadas, juzgados).
- Pérdida de dinero si tienes que repetir la traducción con un profesional válido.
- Problemas legales si el contenido es incorrecto o mal interpretado.
Consejos de Andraca y Román Traductores Jurados a la hora de contratar un verdadero profesional
- Busca en fuentes oficiales: no te fíes únicamente de las redes sociales o de páginas web con escasas referencias.
- Verifica credenciales: pide el número de nombramiento o su inclusión en el listado oficial. Es la mejor manera de evitar que te den gato por liebre.
- Solicita un presupuesto cerrado: en él debes incluir el número de páginas, los plazos, si la entrega es digital o física…
- Confirma que es traducción jurada: aclara desde el principio con el profesional de la traducción que llevará firma, sello y certificación.
- Desconfía de precios excesivamente bajos: la calidad y oficialidad tienen un precio. Si este es demasiado bajo debe hacerte sospechar que si sigues adelante con la traducción esta seguramente sea realizada por un traductor sin credenciales oficiales.
También te puede interesar: